Les comparto una historia que ocurrió hace un par de días, al inicio de semana vi anunciado un cárdigan en venta, esto en uno de los grupos de vecinos de los que formo parte. Mande mensaje para preguntar su precio.
Pasaron varios días para poder coincidir con la persona que lo promovía, hasta que por fin logramos coincidir. El cárdigan llego a mí, me lo medí y dije claro que sí y lo compré.
En la compra de dicho artículo, converse un poco con la anterior dueña del cárdigan, Denisse.
En donde ella me hacia el comentario sobre el color del cárdigan. “El color esta muy bello, por poco me quedo con él, pero mi hija me dijo que no tenía ropa para combinarlo”.
Por mi parte, le comenté que era ideal para mí, ya que el color iba perfecto con la asociación en donde soy directora, Pasac. De manera breve, le compartí nuestro objetivo principal, el cual es construir un parque sustentable en una hectárea en la colonia Sánchez Taboada, que tendremos un huerto urbano y plantaremos árboles.
Demostró interés y me pregunto sobre los árboles que se estarían plantando. A lo cual le comenté que ese detalle se esta definiendo de la mano de nuestro maestro en huerto urbano, Samuel Pérez. Esto a raíz de un listado de lo que se sembrará y plantará para crear un ecosistema sano y funcional para el área.
Denisse con alegría y genuina actitud de calidez me dijo que me estaría compartiendo un alista de arboles frutales y plantas que ella podía donar.
Mi sorpresa fue muy grata, ya que así de mágico fue que la compra de un cárdigan, se convirtió en una donación para PASAC.
Cabe mencionar que durante el día Denisse me mando un listado de más de 10 plantas y árboles de lo que puede donar, y nuestro maestro urbano Samuel, ha revisado el listado, dándole el visto bueno a todos ellos.
Así que ya tenemos una donación. En cuanto sea dicha donación, estaré compartiendo con gusto fotografías.
Para mí, estos primeros 11 meses de estar en este proyecto han sido lleno de magia y todos los días algo o alguien se suma a PASAC.